Los psicoanalistas se han despreocupado por la verificación del número de curas de los psicoanalizados—ésa es su falencia epistemológica—, pero si se consideran, desde un punto de vista impresionista, los delirios colectivos en que incurrió la clase media argentina en la década del setenta, durante el auge del psicoanálisis, sería una prueba en su contra.
Juan José Sebreli, Buenos Aires, ciudad en crisis, Buenos Aires, 2003, p. 212